Es importante resaltar algunos de los aportes que ofreció el notable maestro europeo Ovidio Decroly quien fuera invitado a Colombia a dictar conferencias sobre sus métodos y aporte pedagógico a maestros de establecimientos educativos, entre ellos a los docentes de la Primera Facultad de Pedagogía que funcionaba en Tunja a fines de la década de los años veinte del Siglo XX. Su educación partía del concepto de que la educación era una integración de actividades que permitía a los maestros impulsar centros de aprendizaje y desarrollo para los niños en formación, partiendo del método global de lectura que facilitaba el aprendizaje y la comprensión. Fue así como lo más importante eran los centros de interés que el Ministerio de Educación consideró muy valiosos para la formación de los niños y que realmente estaban en consonancia con las políticas educativas del país. En esas condiciones en la década de los años treinta, el caso de los centros de interés ocuparon la atención de los pedagogos, dado que se interesaron por trabajar con sus educandos aspectos relacionados con la observación, la asociación, las relaciones causa - efecto y por supuesto que la expresión cuyos recursos de enseñanza facilitaban los aprendizajes de los niños.