Este trabajo surge del Diplomado Biblia y Ciudad realizado en el 2013, con el ánimo de aportar nuevas miradas y caminos a nuestra ciudad desde las comunidades cristianas del primer siglo, concretamente en Pablo comprendiendo su estrategia para anunciar el evangelio en algunas ciudades del imperio, esto unido a la propuesta de buen vivir expresada en el pensamiento indígena de algunos pueblos latinoamericanos. El texto quiere contextualizar la ciudad en el mundo grecorromano del siglo primero específicamente en el contexto de Pablo; puesto que él va a proponer un estilo de vida alternativo y sugerente a los habitantes de la urbe, sin salir o abandonar la ciudad. El centro de esta opción de vida, de buen vivir urbano para Pablo es Jesucristo crucificado y resucitado como salvación de todos los seres humanos. Asimismo, desde el contexto latinoamericano en los últimos años se ha reflexionado sobre la vida en la ciudad y la calidad de vida en ella; algunas consideraciones se han desarrollado desde el buen vivir, categoría recogida de la cosmovisión aymara y quechua.