El texto explora las dinámicas de espectacularización de la guerra por vía de la imagen tecnológica en los casos de los operativos militares Fénix y Sodoma, al igual que el uso de la imagen de los cuerpos destrozados de enemigos emblemáticos, en una puesta en escena ideologizada y corporalizada. Estas políticas de la imagen de la seguridad democrática emergen, en primera instancia, como continuidades de procesos de transformación comunicacional iniciados en el gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002), relacionados con la producción de noticias (más precisamente, para este caso, imágenes y narrativas de la fuerza pública y de la guerra); en segunda instancia, tales políticas se configuran a partir de dinámicas derivadas de las narrativas de la “guerra global” y, particularmente, de la llamada “guerra contra el terrorismo”