Se plantean las relaciones entre la lectura, la experiencia y el aprendizaje, a partir del ejercicio de lectura de aprendizaje que Bachelard realiza en su texto La intuición del instante sobre la obra Siloë, de Roupnel, donde confronta sus ideas sobre el tiempo y la duración, que provenían de su formación académica y de la lectura de la obra de Bergson. Se aborda la problematización en el aprendizaje, así como la pedagogía del demostrar y del imaginar. Se constata que se aprende contra un saber previo, al deconstruir conocimientos mal hechos y superar los obstáculos mentales. Según la experiencia y la reflexión de Bachelard, se plantea la posibilidad de una pedagogía centrada en la recuperación del instante preciso del aprendizaje, mientras se replantea todo aquello que una concepción ortodoxa del quehacer didáctico deja por fuera, sin aprovechar la riqueza hermenéutica del proceso de aprender.