La memoria constituye un ámbito central tanto para el individuo como para cualquier colectividad dada. En las siguientes líneas se aportan algunos elementos para el debate público sobre aquella. En el caso de la documentación, parcela claramente integrada a las ciencias de la información y la comunicación, esta es la esencia misma de la propia disciplina documental y la actividad profesional correspondiente. No en vano se ha dicho que la documentación es la memoria del periodismo, pero es una memoria lábil, precaria, con ritmos de trabajo y pautas de producción tanto de medios impresos como digitales, que no siempre favorece la reflexión y la profundidad sobre los temas abordados. De ahí que se reivindique como imprescindible una perspectiva crítica característica tanto del propio profesional como de la lectura social de sus discursos y narrativas mediáticas.