Esta reflexión se constituye en una exploración sobre las transformaciones, la disolución y la reconfiguración del concepto de territorio en la obra del escritor chileno Roberto Bolaño. El lugar de la infancia, las relaciones intertextuales y los contactos con otros universos idiomáticos son los tres aspectos que se abordan aquí y que enfatizan en la ruptura literaria de diversas fronteras como una forma de reconstruir un rostro y una identidad pero que también pueden leerse como una forma del exilio.