Después de analizar cuatro períodos: 1968-1990, 1991-2000, 2000-2006 y 2007-2018, marcados por cambios en el manejo de la tasa de cambio por parte del Banco de la República y política económica gubernamental, técnicas econométricas permiten concluir que pese a la creciente apertura de la economía colombiana, a partir de 1991, la liberalización del mercado cambiario y de flujo de capitales, la paridad del poder adquisitivo, se empezó a cumplir a partir del tercer período aunque en forma rezagada; en el cuarto período, en la medida que los mercados de capitales y la economía se fue consolidando en el proceso de internacionalización, la paridad se empieza a evidenciar. Se usaron pruebas de cointegración de Johansen y regresiones EGARCH. Un estudio detallado de las estadísticas y la política económica prueban que la lentitud en el cumplimiento de la paridad, se debió a que el banco central colombiano siempre intervino el mercado para estimular la depreciación del peso: devaluación gota a gota hasta 1991 y la banda cambiaria hasta 1999. Además, en los últimos años se han producido cambios en la dirección del flujo de capitales internacionales hacia Colombia que han alterado la tasa de cambio más fuertemente que las diferencias en la inflación.