El género no se limita únicamente por la genitalidad del individuo, hay una gran diversidad de géneros que se salen de los dos polos opuestos categorizados como “hombre” y “mujer” (géneros binarios), adjudicándole a cada uno de estos géneros patrones comportamentales y personalidades específicas y limitantes. Se conocen las diferentes características que componen a un individuo en su aspecto sexual e identitario con el género, como la expresión y la orientación sexual, pero más allá de esto hay un sinnúmero de características que se salen de las reglas y que no por eso los diversos tipos de géneros que no encajan en las imposiciones culturales deben ser invisibilizados o estigmatizados.