La crítica condición de salud de las personas privadas de la libertad en las cárceles de Colombia está ampliamente diagnosticada, a pesar de lo cual este problema no ha tenido solución a través de los años. El derecho a la salud de los reclusos sufre debido a unas deplorables condiciones de vida y salubridad que son generadas inevitablemente por la incapacidad del Estado de hacerse cargo de tan numerosa población carcelaria. Como parte de esta incapacidad, y concurriendo al agravamiento del problema, existe una muy deficitaria atención en salud dentro de los establecimientos carcelarios. Las actuales formas de abordar el problema y algunas propuestas para solucionarlo se tratan en este artículo.