La epidemia del Zika y sus efectos a nivel neurológico, principalmente la microcefalia, han activado las alertas a nivel de Latinoamérica y Colombia debido al aumento de incidencia de estos casos; esto evidencia la necesidad de seguir los protocolos que permitan el adecuado diagnóstico materno y neonatal. A continuación, se presenta el caso de un neonato con sospecha de antecedente de exposición al virus Zika en su primer trimestre de gestación, sin anormalidades ecográficas pre natales ni déficit neurológico o microcefalia; en él, se evidenció mediante radiología la ausencia de septum pellucidum asociado a otras malformaciones a nivel cerebral mediante ecografía y TAC.