En Colombia el fenómeno del desplazamiento forzado ha generado múltiples problemáticas sociales, políticas económicas, culturales y educativas. En el ámbito educativo, lugar de estas reflexiones, la llegada a las aulas de la población en condición de desplazamiento, ha obligado al profesorado a cumplir roles para los que no se había preparado y ha hecho visible la multiplicidad de vacíos e inconsistencias sociales, educativas y pedagógicas; surge entonces la imperante necesidad de una política social y educativa que fortalezca los procesos pedagógicos y garantice atención integral a dicha población.Las preguntas que orientan estas reflexiones son las siguientes: ¿Cuál es el lugar de la política educativa, para la atención a la población en situación de desplazamiento en Colombia? ¿Se trata de una apuesta por el derecho a la educación y por la potenciación del sujeto o es sólo una acción asistencialista? ¿Conoce el Estado la realidad de las escuelas y maestros y las acciones que están realizando con la población desplazada por la violencia?
