Valiosísimo aporte hizo Piaget a la psicología del aprendizaje; quizá lo más significativo en el campo de las ciencias pedagógicas en los últimos siglos. Según él, el aprendizaje no es un mero almacenamiento memorístico de datos trasmitidos por el mundo circundante (padres, maestros, compañeros): es toda una reelaboración por parte de su mente hasta lograr un ajuste con los conocimientos anteriormente asimilados, y que se traduce en lo que él denominó "equilibrio”. Cada nuevo conocimiento pone en crisis ese equilibrio anteriormente alcanzado hasta que una nueva organización o estructura reemplaza la anterior para devolver el equilibrio.