Las propuestas artísticas creadas al margen de la estética occidental, representadas en este caso en la producción que vienen generando algunos artistas de procedencia indígena, permiten pensar su producción artística como un espacio de resistencia, un esfuerzopor liberar las mentes de estereotipos y reacciones mecánicas impuestas por las nociones e instituciones culturales, sociales, políticas éticas y estéticas dominantes.El arte indígena actual, sin renunciar a su identidad, reelabora mitos, símbolos y diseños para generar un estilo inspirado en sus tradiciones pero capaz de ser incluido dentro del contexto artístico contemporáneo.El arte indígena como objeto estético es capaz de dialogar con las prácticas artísticas que se desarrollan en el mundo globalizado, pues plantea actitudes de indisciplina frente a las construcciones culturales y racionales de la civilización euroamericana. Está llamadoentonces a redimensionarse en el contexto cultural global como movimiento artístico incluyente y contemporáneo que intenta romper las ideas predominantes para encontrar nuevos significados a la vida, trascender fronteras, desatar la imaginación, y liberar esos mundos intangibles, volátiles e inaprensibles que han permanecido en resistencia.