La estrategia de transectorialidad se diseña en equipos de trabajo de la administración pública. Se articula a la construcción de importantes obras de infraestructura ambiental con espacios de apropiación sociocultural en Bogotá. Este artículo sostiene que la parcelación del sistema educativo y el desequilibrio entre competencias cognitivas y emocionales afectan los resultados de las obras técnico-sociales en las localidades. Las líneas argumentales planteadas refieren que la educación superior ignora el desarrollo de competencias emocionales y socioculturales evidenciadas en trabajos de equipo y liderazgo; la excesiva fragmentación del conocimiento entre niveles, cargos de escritorio y trabajo de campo trastorna estilos y resultados de gestión con impacto en las comunidades. Se concluye que el trabajo en equipo representa el epicentro transectorial en procesos transversales de gestión, y que la metodología de cartografía social es una opción de resignificación de territorios locales en medio de incertidumbres por políticas neoliberales.