Se estudiaron 96 enfermos con 2 métodos. El primero es la entrevista psiquiátrica corriente que produce una historia narrativa tradicional. El segundo sistema se origina en una entrevista estructurada cuya base es un cuestionario de auto-informe, de donde resulta una forma estandard simplificada. Los autores comparan los productos de estas evaluaciones independientes. Aunque el último método produjo una frecuencia mayor en la relación de todos los síntomas, en general, en ambos fue similar la exactitud de los diagnósticos. También se enumeran los beneficios potenciales del uso de historias estandarizadas.