<p>A pesar de las críticas sobre el tamaño del Estado, la descentralización sirvió para la creación de un gran número de entidades públicas, las cuales, sin embargo y con el paso del tiempo, perdieron su rumbo y se quedaron como fortín político y centros burocráticos. Sin embargo, desde la reforma introducida por la Ley 489 de 1998, la descentralización se acentuó mediante la creación de personas jurídicas indirectas, o sea, asociaciones de entidades públicas, que se rigen por las normas del derecho privado. Su finalidad fundamental fue seguir la operación de aquellas empresas estatales que fueron disueltas, pero ahora siguiendo las normas del derecho privado y la consecuente participación de particulares, por lo cual se afirma que este tipo de organismos se constituye en una forma de privatizar el Estado.</p>