Esta investigación cualitativa se basó en la enseñanza de la educación ambiental a través de la siembra de alimentos y plantas nativas de la ciudad de Bogotá. Los estudiantes pudieron trabajar la tierra, pensando como urban@s de esta ciudad, a partir de su experiencia sembrando Quinua, Amaranto y Maíz en su colegio, descubrieron una historia de solidaridad, de conexión con la tierra y de re-significación de las plantas. Desde la educación ambiental los estudiantes desarrollaron diferentes talleres pedagógicos aprendieron a sembrar las diferentes especies jugando y construyendo huertas con figuras de animales. Estos estudiantes enseñaron con sus saberes como volver a sembrar en esta ciudad de cemento de una manera natural, de una manera originaria.