Hoy me han invitado a tomar la pluma, para dar apertura a este texto, a esta revista que desde su nombre nos convoca a rememorar las implicaciones de enfrentarnos al papel en blanco, de exponer nuestras ideas para proponerlas en un dialogo asincronico que nos ofrece las pausas indispensables para acercarnos, deleitarnos, detenernos y transformarnos en el encuentro. Que es la lectura sino una relacion de verdadera amistad, al decir de Proust (2002) “En la lectura, la amistad a menudo nos devuelve su primitiva pureza. Con los libros no hay amabilidad que valga. Con estos amigos, si pasamos la velada en su compania, es porque realmente nos apetece” (p.53)1. Nietzsche, en su libro El Capital, nos propone tomar los libros como preguntas no como respuesta abriendo la posibilidad a una lectura de caracter transformador...