ResumenEste artículo rastrea las distintas descripciones que hiciera Agustín de Hipona sobre las figuras del músico y el cantor.Aunque en sus primeros escritos tales figuras se oponen entre sí -en donde solo el primero es valorado en virtud de que es capaz de acceder al mundo inteligible-, en los escritos de madurez opta por valorar la actividad del cantor dentro del coro litúrgico, al punto que lo describe como vivencia y expresión del mundo espiritual.El artículo reconstruye uno a uno los dos modos en que Agustín da sentido a estas figuras.Finalmente, se muestra que entre una y otra aproximación operan cambios teóricos, centrados en: a) una revaloración de la materia; b) uso de distintas estructuras teóricas para acercarse a la música práctica; c) apertura