El Ébola es una enfermedad infecciosa viral altamente letal que puede ser producida por una de sus varias cepas, el 8 de agosto del 2014 la Organización Mundial de la Salud la declaró como una “emergencia de salud pública de interés internacional” debido al brote de la cepa Zaire que ha afectado a varios países de África occidental Guinea Conakry, Liberia, Sierra Leona, Malí y Nigeria, y que deja a enero de 2015 un saldo de más de 20.000 personas infectadas y al menos 8000 muertes. El presente artículo reflexiona sobre la situación actual de la epidemia, sus consecuencias particulares sobre el personal de atención en salud y su relación con los determinantes en salud de dichas poblaciones.