<p>El aniversario de la PGM representó una oportunidad para reflexionar sobre la actualidad de un conflicto que cambió radicalmente la fisionomía del mapa europeo. En particular, a través de una reconstrucción historiográfica que coloca las raíces de la guerra en el Este de Europa. Desde esta perspectiva, se quiere analizar cómo las problemáticas presentes en Europa Oriental se convirtieron en el detonante de una crisis generalizada. En ese orden, se pretende destacar que el conflicto tuvo un carácter más radical en los territorios herederos de políticas imperiales seculares y que produjo consecuencias desestabilizadoras que siguen afectando los equilibrios mundiales.</p>