El presente trabajo explora la naturaleza de la educación y su relación con los múltiples y heterogéneos entornos que le constriñen, posibilitando o inhibiendo los fines buscados. Ello implica una mirada a la persona como un ser en desarrollo, a las culturas como redes de significados, a las formas de difusión de sus innovaciones, a los modelos de concreción de sus intenciones. Al mismo tiempo se esboza la especial complejidad que adquieren la educación y la escolaridad en el contexto de un mundo globalizado e interdependiente.