Desde las decadas finales del siglo XIX la ciudad de Medellin se erigio como la manifestacion mas excelsa de una cultura paisa que conciliaba las fuerzas de las tradiciones con los desafios de la modernidad. El villorrio fundado en el siglo XVII permanecio casi por dos siglos eclipsado por la soberbia Santa Fe de Antioquia, de raigambre mas antigua y especialmente beneficiada por las economias coloniales soportadas en la mineria.