Los resultados de experimentaciones en la relación espacio-estructura permiten nuevas maneras de proceder respecto a la búsqueda de rigidez ante sismos con elementos estructurales de grandes dimensiones. Esta relación ha constituido un recurrente punto de conflicto en la arquitectura, y de las distintas maneras de enfrentarlo se ha nutrido su historia. La estrategia proyectual de habitar la estructura no es nueva; está presente desde hace mucho en la arquitectura. Lo nuevo es su uso como resultado de una búsqueda espacial consciente y constituye un tema de investigación para enriquecer la manera de proceder en cuanto a la materialidad de la estructura.