La Segunda consideracion intempestiva delimita una relacion funcional con la historia: esta beneficia a la vida cuando se posiciona desde una perspectiva ilusoria, disimulada y estrategica. Se analizan dos consecuencias: la critica de la historia como ciencia objetiva y los matices que se desprenden de considerarla como relato. Si G. Agamben ha mostrado como la historia surge en el intersticio que hay entre lenguaje y discurso, el debate debe orientarse al proceso por el que la subjetividad adviene a un lenguaje que debe “historizar”. Esto implica explorar las relaciones entre felicidad e historia como deposito de sentido y de esperanza.