El conocimiento constituye, hoy en día, uno de los bienes más preciados no sólo en el ámbito académico sino en el productivo, y ha de ser visto como una herramienta estratégica válida desde la perspectiva de la adquisición de información o desde la utilización práctica del mismo (desempeño, competencia), y como elemento clave del proceso de aprendizaje . Es así como el presente artículo surge de la necesidad de reflexionar acerca de las estrategias que pueden ser utilizadas para incentivar el aprendizaje de los estudiantes de Diseño de Modas, potenciando la creatividad tan necesaria para que el futuro profesional del diseño pueda innovar constantemente y responder a las exigencias de un mundo cambiante que se mantiene en continua competencia.