A En 1978, Julio Cortazar y Carol Dunlop se dieron a la tarea de planear y madurar elproyecto que dio lugar a la publicacion de Los autonautas de la cosmopista en 1983.Con rigor cientifico, se dedicaron a consignar, en un diario de ruta, un viaje de 33 diasrealizado en 1982 por el trayecto Paris-Marsella de la Autopista Sur en una furgoneta Volkswagen, sin salir nunca de la autopista, explorando cada paradero a razon de dos por dia (durmiendo siempre en el segundo) y registrando todas las observaciones pertinentes(descripciones topograficas, climaticas y fenomenologicas), con la finalidad de“escribir el libro de la expedicion (modalidades a determinar)”. En el texto, nunca definenque hace pertinente una observacion y, ademas de la decision de que el libro sea unacronica de viaje, la forma, dimension y soporte quedan abiertos. Tal apertura resulta inaceptable en un proyecto de investigacion cientifica, pero para elproceso particular de esa creacion artistica es vital. Cortazar y Dunlop no necesitan yno desean anticipar el tipo de informacion que van a recolectar, ni lo que van a hacercon ella; se lanzan a la exploracion de un entorno utilitario y futil de experiencias impredecibles,recogiendo informacion (en algunos casos, aparentemente intrascendente oinconexa) que, meses despues, tras la muerte de Carol Dunlop, organiza Cortazar pararealizar una impresionante obra de arte de enorme profundidad.
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Educational Research and Science Teaching
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FuenteCuadernos de Música Artes Visuales y Artes Escénicas