El bienestar animal es un tema de preocupación desde hace algunas décadas. Investigaciones han evidenciado su relación con el estado de salud física y psicológica en los animales, y con la producción, la reproducción y la calidad de los productos pecuarios. En este despliegue, que ha generado políticas, estándares y modelos, entre otros, se identifica que el interés de brindar buenas condiciones a los animales se basa principalmente en motivos económicos y de utilidad para los seres humanos. Desde esta perspectiva, el presente artículo describe algunos aspectos importantes con el fin de propiciar en el lector una postura crítica que sirva para ampliar, a futuro, una discusión menos antropocéntrica sobre la producción primaria de productos pecuarios.