La presente reflexión parte del libro VI de la Ética a Nicómaco y de los resultados de un estudio anterior sobre la phrónesis en Aristóteles, en el cual demostré que la phrónesis aristotélica no es una ciencia contemplativa, sino una sabiduría práctica se dirige inmediatamente a la acción por el conocimiento de los particulares y los medios para alcanzar los fines propuestos por la acción. Esa sabiduría práctica es verdadera y, por tanto, normativa ya que conoce universalmente el fin de la vida humana. En efecto, para Aristóteles la phrónesis es un estado cognitivo habitual, esto es, racional, que presupone un estado volitivo no-racional y un estado cognitivo no estrictamente racional, que es la experiencia. [Portugués] [Fragmento]