“Avatares”, palabra no referenciada en el diccionario de la Real Academia Espanola de la Lengua, es la que mejor se me antoja para aprehender las vicisitudes epistemologicas, disciplinares, organizacionales y profesionales que entrana la pregunta sobre lo politico y la politica en Colombia expuestas en el libro, La Ciencia Politica en Colombia: ?una disciplina en institucionalizacion? Las preguntas no son extranas en el amplio y complejo mundo de las ciencias. Si bien la que guia este libro se circunscribe al ambito nacional colombiano, desde los anos setenta en el siglo XX, circulan con mayor notoriedad interrogantes en torno a la historiografia del siglo y en buena medida la politica y lo politico se han constituido en uno de los ejes de mayor referencia para comprender el caracter y los alcances de los cambios en las sociedades, las culturas y las naciones contemporaneas. Es desde hace cuatro decadas aproximadamente que la historiografia politica va inscribirse en los campos de la reflexion academica de las ciencias sociales. Jacques Le Goff, el celebre pensador frances de la Escuela de los Annales, lo dejo planteado en 1972 en un ensayo titulado “?Es la politica todavia el esqueleto de la historia?”. Esta pregunta se articula con la pregunta que atraviesa este libro a manera de memoria academica del Primer Encuentro de Facultades y Programas de Ciencia Politica, organizado por la Asociacion Colombiana de Ciencias Politicas (ACCPOL). La pregunta central del libro se dirige hacia los avatares de la institucionalizacion de la disciplina en el pais. En esta perspectiva,