El artículo se refiere a Medellín, concretamente a las problemáticas de la criminalidad, el sicariato, la proliferación de grupos armados, la inseguridad, la violencia y las políticas públicas orientadas a contrarrestarlos, pero reconociendo el papel que en su transformación y permanencia tienen el conflicto armado y la guerra. Se advierte que en la ciudad por incidencia de la guerra no solo se están reconfigurando los conflictos, se están redefiniendo los mediadores y se está abriendo espacio a otras institucionalidades, sino que además se están creando sentidos de orden y ordenes diferentes al estatal.