Usando la Encuesta de Calidad de Vida del DANE-2012 para la construccion de un conjunto de indicadores de deficit habitacional y pruebas t para diferencia de proporciones —controlando por nivel de ingreso— se evaluo la hipotesis de que las mujeres colombianas tienen una mayor preferencia por la calidad habitacional que los varones. Los resultados arrojan evidencia estadistica a favor de esta hipotesis. En particular, los indicadores son de mejor calidad cuando el jefe del hogar es mujer para la disponibilidad de servicios publicos domiciliarios, calidad estructural de la vivienda y dotacion cocina-bano; en tanto que los indicadores de hacinamiento y deficit cuantitativo presentan una brecha un poco menor pero significativa en el mismo sentido. Los diferenciales por genero son mas robustos para los hogares con menores niveles de ingreso y se hacen no significativos en algunos casos para los ingresos altos. Se concluye que las mujeres colombianas —dado un nivel de ingreso similar al de los varones— tienen una mayor propension por procurar mejores niveles de calidad habitacional a sus familias que los varones. Las implicaciones de politica publica frente a la focalizacion de recursos para la vivienda son inmediatas.