Según las Naciones Unidas, el cambio climático supone efectos adversos, referidos a cambios en el medio ambiente físico o en la biota, con consecuencias nocivas significativas en la composición, la capacidad de recuperación y la productividad de los ecosistemas naturales o sujetos a ordenación, así como en el funcionamiento de los sistemas socioeconómicos, o en la salud y el bienestar humano. Se analizan aquí, cuáles son los tipos de vulnerabilidad que se observan en la población de los Santanderes.